Siguiendo los lineamientos de la campaña “Más luces, menos ruido”, la comuna capitalina invita a sumarse a esta movida contra la pirotecnia sonora.

En distintos sectores de la ciudad, el municipio capitalino continúa intensificando la campaña para la erradicación de la pirotecnia sonora. “Más luces, menos ruido”, es el lema que se adoptó para concientizar y sensibilizar a la población sobre el daño que causan en las personas con CEA, adultos mayores y animales, los estruendos de la pirotecnia.

En relación al tema, Mirta Amarilla, mamá de Ramiro, un joven de 15 años con Condición del Espectro Autista, dijo: “Las políticas que ha implementado la Municipalidad, a través de campañas de sensibilización y concientización, están surtiendo efecto y se nota un significativo avance en la materia. Hace varios años venimos pidiendo esto como padres de chicos con CEA y desde el inicio de la gestión del intendente Jofré, con la creación de la Dirección de Discapacidad, nos dimos cuenta que el jefe comunal empatiza con las personas con discapacidad y eso es algo que nunca tuvimos en la ciudad; y para los padres de chicos con discapacidad estas acciones son dignas de reconocimiento”.

“Antes, todo lo mirábamos de lejos; hoy es común ver un chico con discapacidad bailando zumba, participando de algún taller, tienen su transporte puerta a puerta gratuito y esta campaña contra la pirotecnia sonora que se lleva adelante nos enorgullece como ciudad. Sentimos que hoy nuestros chicos están verdaderamente incluidos y son uno más, y esa ha sido siempre nuestra lucha” enfatizó.

Como madre de un joven con CEA, Mirta explicó: “Hemos recorrido un largo camino para llegar a lo que Ramiro es hoy, un chico más fortalecido, aunque todavía existe un gran problema para los padres que tenemos chicos con esta condición y es el uso de la pirotecnia –indiscriminada- cuando llegan las fiestas de fin de año. A partir del mes de noviembre ya comienza nuestro gran dolor de cabeza y preocupación, más que nada por ellos”.

“Cuando llega fin de año, todas las familias arman el arbolito y están súper felices esperando que sean las 12 para abrazarse y festejar. Para nosotros, ese es el momento más crítico porque son los minutos donde más bombas se escuchan y el abrazo tiene un único fin: la contención de nuestros hijos que se encuentran sumamente afectados; y, a veces, si la condición es muy severa, debemos darles alguna medicación para que puedan atravesar ese momento medianamente tranquilos” afirmó.

“Afortunadamente, hoy contamos con una Municipalidad que nos apoya y para esto lanzó la campaña “Más luces, menos ruido”; eso es utilizar la empatía con quienes necesitan ser escuchados. Nosotros esperamos que la comunidad entienda y se sume a esta excelente campaña para que nuestros niños puedan tener unas felices fiestas y no pasarlas encerrados por los estruendos de la pirotecnia que les causan mucho daño” finalizó.

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